A lo largo de la historia muchos han sido los pueblos que han habitado en el actual término de San Pablo de los Montes dejando importantes restos arqueológicos a su paso.
Los restos arqueológicos más antiguos pertenecen a tribus prehistóricas que habitaron zonas del actual término municipal y su presencia se constata por medio de útiles de piedra o sílex que se han encontrado asociadas a los cauces de algunos de los arroyos del municipio.
Los primeros indicios de grandes civilizaciones los encontramos ya en el siglo II aC, cuando los romanos dejaron constancia de su presencia y tránsito, con la aparición de restos de minas de hierro y otros metales en distintos lugares del monte público que debieron tener mucha importancia entonces y que se pueden observar todavía.
De la Edad Media nos encontramos con restos de asentamientos de origen visigodo (siglo VII dC), que posteriormente fueron reutilizados por los Padres Agustinos para la construcción del Convento de los Padres Agustinos que esta orden religiosa realizó en el siglo XV.
Ya en el siglo XIII se construyó una torre defensiva en teoría por habitantes de un núcleo de población establecido en las proximidades del actual municipio, para defenderse de posibles ataques de bandoleros o musulmanes muy frecuentes en aquella época; se cree que alrededor de esta torre comenzarían los primeros asentamientos de población que luego darían lugar al municipio de San Pablo de los Montes.
Esta torre después se reconvertiría en campanario de la actual iglesia parroquial de la localidad.
Esta torre después se reconvertiría en campanario de la actual iglesia parroquial de la localidad.
También contribuyó a la aparición de este primer núcleo urbano, según la tradición popular, la aparición en 1262 de la imagen de la Virgen de Gracia, dentro de una fuente cercana al actual municipio, a un pastor llamado Magdaleno, el cual llevó la noticia por todos los pueblos que fue encontrando a su paso hasta que al final fue creído en el municipio de Ajofrín.
Fueron las gentes de dicho pueblo las que construyeron una pequeña ermita (Ermita de la Fuente Santa) sobre la fuente de la aparición, para guardar la imagen aparecida y darle culto. Se cree que la ruta de peregrinación forjada a partir de entonces pudo contribuir a la aparición y consolidación de San Pablo de los Montes, de ahí el gran arraigo y veneración que los habitantes del municipio profesan a nuestra Virgen de Gracia.
http://www.aytosanpablodelosmontes.es/historia.aspx
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