“Canto rodado, pequeño, que no llegas a ser piedra. Canto gastado y redondo de tanto rozar la tierra. En todos sitios estorbas, de todos sitios te echan. El labrador, no te quiere y, al caminante molestas. Y tú rodando y rodando … sin que nadie te defienda.
Buscando tierra de nadie para que no te echen fuera. Y al mismo tiempo que ruedas, vas dando tumbos y tumbos, y te vas haciendo tierra, te vas haciendo pequeño, ¡ y te va ahogando la pena !” Valentín Villalón
Construir un edificio es resolver en cierta medida un rompecabezas, un puzle. Juntar, unir, entralazar materiales y elementos diversos para crear formas, volúmenes y espacios arquitectónicos, de forma armoniosa, que permitan al ser humano protegerse de la intemperie o habilitar espacios para crear, trabajar o realizar actividades diversas.
En las obras de rehabilitación se ha de recomponer ese puzle que ha perdido piezas, o sus “teselas” se han deteriorado. Hay veces que esos rompecabezas arquitectónicos admiten la inclusión de piezas nuevas, siempre y cuando sus bordes o aristas se adapten sin daño al hueco existente.
En este patio, del que adjuntamos algunas fotografías, se ha efectuado la renovación del solado del mismo, eliminando una deficiente baldosa cerámica de poca entidad e incorporando un elaborado solado de canto rodado. Solado dispuesto entre maestras de acero inoxidable, alineado a 45 grados formando espiguillas.
Jose María Gutiérrez Arias
http://www.consorciotoledo.org/canto-rodado/
No hay comentarios:
Publicar un comentario