Hay lugares que por sus escasos restos, testimonios, difícil localización, o simplemente por su falta de documentación, han caído en el olvido mas absoluto, yo los llamo “enclaves invisibles”.
Estos lugares son difíciles de encontrar si no se tiene conocimiento de su existencia y de su ubicación, que en muchos casos solo conocen los mas viejos del lugar, y a los cuales hay que recurrir para poder llegar a ellos.
En este caso visitaremos uno de estos enclaves, de los cuales solo unos restos nos dejan entrever su antigua existencia, El Castillo de Melgar en Villasequilla (Toledo).
Estos lugares son difíciles de encontrar si no se tiene conocimiento de su existencia y de su ubicación, que en muchos casos solo conocen los mas viejos del lugar, y a los cuales hay que recurrir para poder llegar a ellos.
En este caso visitaremos uno de estos enclaves, de los cuales solo unos restos nos dejan entrever su antigua existencia, El Castillo de Melgar en Villasequilla (Toledo).
¿Como llegar?
Se puede llegar a él desde Villasequilla por la carretera CM-4006 en dirección Huerta de Valdecarábanos. A unos 1,7 kilómetros hay que desviarse a la derecha por un camino con un cartel (Pabellón), a pocos metros se encuentra a las derecha la finca La Dehesa.
A unos 2.6 kilómetros se toma el ramal de la izquierda, paralelo a la línea de ferrocarril, siguiendo por él hasta ver una pequeña casa de labor a la derecha.
Unos metros más adelante, recorridos ya unos 5,3 kilómetros sale un camino a la derecha, el camino del despoblado, y a los pocos metros, sobre un cerro adyacente a un viñedo, encontramos los restos del castillo.
Hay que subir al Cerro para poder ver lo poco que queda de el, ya que desde lejos apenas unas piedras nos dan testimonio de la existencia del mismo.
No obstante recomiendo preguntar en el pueblo como llegar en caso de no tenerlo muy claro.
A unos 2.6 kilómetros se toma el ramal de la izquierda, paralelo a la línea de ferrocarril, siguiendo por él hasta ver una pequeña casa de labor a la derecha.Unos metros más adelante, recorridos ya unos 5,3 kilómetros sale un camino a la derecha, el camino del despoblado, y a los pocos metros, sobre un cerro adyacente a un viñedo, encontramos los restos del castillo.
Hay que subir al Cerro para poder ver lo poco que queda de el, ya que desde lejos apenas unas piedras nos dan testimonio de la existencia del mismo.
No obstante recomiendo preguntar en el pueblo como llegar en caso de no tenerlo muy claro.
Coordenadas: 39.844135,-3.680308
Estado
Quedan muy pocos restos de esta fortificación. Ni siquiera llegan a un metro los muros, solo cimientos de las Murallas que permiten ver la planta del Castillo y el Aljibe Central todavía visible en medio del Cerro.
Por lo demás solo muros de los cimientos de mayor o menor altura, y piedras rodadas a lo largo de todo el enclave.
Por lo demás solo muros de los cimientos de mayor o menor altura, y piedras rodadas a lo largo de todo el enclave.
El Castillo
El enclave, conocido por el Castillo o el Acebuch, fue en origen castro romano, aunque en sus alrededores se han encontrado restos de época más antigua.
Posteriormente perteneció a visigodos, musulmanes y cristianos ya como poblado surgido alrededor de un castillo cuyos restos se localizan en la cima del cerro.
El castillo fue mandado demoler hasta los cimientos al terminar la Guerra de Sucesión Castellana (1475-1479) por Isabel la Católica en un acto vengativo, pues el señor de Melgar era partidario de la Beltraneja, bando perdedor de la contienda, quedando el castillo arrasado y olvidado, hasta nuestros días, muy parecido a la suerte que corrió el no muy lejano Castillo de Olmos.
Debajo existió una Alquería o Aldea al abrigo del Castillo (Melgar), de cabañas de piedra y tejados de paja, hoy desaparecida, de la cual apenas quedan piedras rodadas y que parece ser que junto con otras (Melgar, Mezquita, Artal y Villasequilla) formaron las poblaciones cercanas de Villamuelas y Villasequilla de Yepes.
Posteriormente perteneció a visigodos, musulmanes y cristianos ya como poblado surgido alrededor de un castillo cuyos restos se localizan en la cima del cerro.
El castillo fue mandado demoler hasta los cimientos al terminar la Guerra de Sucesión Castellana (1475-1479) por Isabel la Católica en un acto vengativo, pues el señor de Melgar era partidario de la Beltraneja, bando perdedor de la contienda, quedando el castillo arrasado y olvidado, hasta nuestros días, muy parecido a la suerte que corrió el no muy lejano Castillo de Olmos.
Debajo existió una Alquería o Aldea al abrigo del Castillo (Melgar), de cabañas de piedra y tejados de paja, hoy desaparecida, de la cual apenas quedan piedras rodadas y que parece ser que junto con otras (Melgar, Mezquita, Artal y Villasequilla) formaron las poblaciones cercanas de Villamuelas y Villasequilla de Yepes.
A dia de hoy se encuentra irónicamente, pese a su avanzado estado de desaparición, bajo la protección de la Declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949, y la Ley 16/1985 sobre el Patrimonio Histórico. Desgraciadamente es un lugar destinado a su desaparición total a lo largo de los años.
Mas info
Fuente: http://otraiberia.wordpress.com/2013/06/03/enclaves-invisibles-el-castillo-de-melgar-villasequilla-toledo/
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